miércoles, 16 de julio de 2008

Para Adriana Hernández
CON LA CARNE ROTA, con los brazos roídos de tanta oscuridad,
voy lanzando esquirlas serpentinas
a la esférica superficie,
con el pensamiento leído,
con mi gesto en pie en la batalla
digo tu nombre aduraznado en mi sopor.
Así te observo, noche, desde mi caverna llena de inmensidad.

Fundidos ya los vocablos de mi risa, recojo tu paisaje
en la retina,
en un balcón más barroco cual morada nocturna en lo profundo
del estanque que tañe lleno de estrellas como de lumbre
como de furia,
en la sesga de la historia que da la mirada.
A caballo heráldico lleno de sueños
y con mi boca llena de palabras
he de nombrar tu más mínima señal
como nombro al mundo, en esta noche navegable.
Detrás de mis pestañas filamentosas.




Marco Antonio Castañeda

5 comentarios:

Anónimo dijo...

aloh = hola
como estas pues jaja chido blog algo malo el color te rwacomiendo usar colores mas fuerte no morado claro jeje
pues paso a dejarte mi firma entu blog chido epsero q prospere

Marco A. Castañeda dijo...

Hola Sac. Estoy bien gracias. Tomaré en cuenta tus recomendaciones. Gracias por tu buen augurio.

Saludos.
MAC

Vicko Suárez dijo...

Me gusta el ritmo de este poema que toma los tintes bélicos necesarios para el tema que maneja.



Con la carne rota y las alas partidas ...

Anónimo dijo...

Gracias

Anónimo dijo...

Sobrevivo, me paso un accidente, casi muero. pero sobrevivo. agregame compa amores_perros@hotmail.com